El milagro internáutico I

Al igual que el resto de cosas desde que hemos llegado, esto parecía trivial... hasta que se tornó en una práctica digna de laboratorio. Véase la descripción a continuación:

Material disponible:

- Socket RJ-45 conectado al proveedor de servicio de Internet (ISP).

- Carta del ISP con un ‘username’ y una ‘password’, que gentilmente te da tu casero para que configures el router.

- CD del ISP con drivers y configuración para el router, que tienes que solicitar dos veces para descubrir al recibirlo que es para los router que ellos te venden (o sea, totalmente inservible).

NOTA: El ISP no da soporte si no les compras a ellos un router y por ello te da un teléfono de Atención al Cliente. También tienes disponible unas FAQs y guía de posibles problemas de configuración de fácil acceso... desde su página en Internet.

- Compañero de piso que te dice que conectes el router más nuevo porque el otro no funciona bien, que es muy fácil aunque no recuerda dónde están los cables de cada router, ni los manuales de instalación, ni los drivers y acto seguido te dice que se va de viaje justo esa semana.

- Router wireless (hay dos, de los cuales conseguimos encontrar un par de cables de alimentación, un cable USB y un RJ-45 de cabeza plana)

- Microfiltro.

- Teléfono-copiadora-fax y cable RJ-45.

NOTA: Para evitar perder tiempo innecesariamente ya dispone del teléfono-copiadora-fax conectado al microfiltro y éste al socket.

Objetivo:

- Conectar ambos equipos satisfactoriamente, configurar el router y acceder a la página del ISP para que te felicite por haber dado los pasos correctos (y no tirarte mucho de los pelos).

Sugerencias para la resolución:

- Descubre cuál de los dos routers es el adecuado para conectarte. (NOTA: no tienes compañeros de los que copiarte ni a los que preguntar, se recomienda utilizar el método prueba-error).

- Una vez conectados los dispositivos según la topología más adecuada, búscate la vida para averiguar el modelo del router seleccionado, encontrar los manuales y el/los drivers. Puedes acudir para ello a la biblioteca pública donde gratuitamente te puedes conectar a Internet gracias a una red wireless en la que te caes cada 5 minutos y cuya velocidad da risa debido a problemas ajenos a los funcionarios de la biblioteca.

- Instala el/los drivers y configura el sistema.

- Reza para que la conexión funcione. En caso contrario, encuentra el error o sigue en el net-ostracismo.